Una pericia caligráfica, tal como su nombre lo indica, requiere la presencia de caligráfica. A grandes rasgos los peritos caligráficos son personas encargadas de comprobar si una firma o texto escrito a mano corresponde a la persona que dice ser.
Por medio de algunos aspectos particulares dados por el desarrollo de la ciencia, los expertos pueden determinar la veracidad del autor de un texto escrito o la falsedad del mismo.
De alguna manera, los peritos caligráficos desarrollan un trabajo de investigación profundo, tanto como un detective cuando busca el culpable de algún acto delictivo, solo que la principal y única herramienta de trabajo para el perito caligráfico es la escritura.
Es importante no confundir la pericia caligráfica con la grafología. En el caso de la grafología importa más los aspectos psicológicos de quien escribe que saber realmente quien es el autor. Una ciencia se encarga de la comprobación del autor de la escritura y la otra de los rasgos de personalidad de quien escribe.
Elementos útiles en una Pericia Caligráfica
Escritura en cuestión: para poder realizar una pericia caligráfica es necesaria la presencia de una escritura principal que es la que necesita ser analizada y la que se determinara como verdadera o falsa. Esta escritura o firma debe tener las condiciones mínimas de legibilidad y estado, pues el perito necesita de distintos elementos de la escritura para poder realizar su análisis.
Elementos como la presión ejercida en el papel en cada letra, tipo de tinta y de más datos de forma de la letra.
Escritura de comparación: la herramienta por excelencia en la pericia caligráfica es la comparación. Por esta razón, la escritura de comparación es fundamental. Esta es una escritura verídica de quien se presume es el autor de la escritura en cuestión.
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