Con una prueba de pericia caligráfica es posible identificar la veracidad o falsedad de un manuscrito y si nos ponemos a pensar bien, el tipo de conclusión a la que es posible llegar con esta ciencia o profesión es bastante contundente.
Solo tienes que pensar en que es una herramienta usada jurídicamente y que puede dar la prueba final para determinar la culpabilidad o inocencia de un procesado. Un error en una prueba caligráfica puede significar la encarcelación de un inocente, que tendrá que pagar por un delito que no cometió.
Confiar en este tipo de pruebas es necesario, aunque sea para tener tranquilidad cuando sea usada en un caso a favor o en contra. Pero no hay mucho de qué preocuparse, pues la justicia misma confía en su labor. Confía en que las conclusiones a las que llega son certeras y que todo su desarrollo va más allá de simples apreciaciones humanas y que corresponde a un desarrollo científico comprobable.
A continuación, queremos darte algunos argumentos razonables de por qué deberías confiar en una prueba de pericia caligráfica.
Pericia caligráfica: ¿por qué son confiables?
Trabaja sobre contenido estudiable: aunque normalmente se está muy familiarizado con la escritura son pocas las personas que conocen las características particulares de ella. La escritura es una marca de identificación. Cada persona posee una forma particular de realizar grafitos a mano, que no puede ser suplantada. Nadie realiza los grafitos de la misma manera que otra persona.
Posee un gran desarrollo de técnicas de estudio: después de algunos años de desarrollo de esta ciencia, los expertos han podido establecer estándares de medición certeros y confiables, para diferenciar los manuscritos de una persona por sobre los de otra. Técnicas y procedimientos comprobados con práctica.
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